Arribo de enormes ballenas al Uruguay cautiva a los turistas

Cientos de curiosos diariamente se acercan a las playas para disfrutar de los saltos, aletas, caudales y soplidos de la ballena Franca Austral.

Montevideo (URUGUAY), 08 de Agosto — 2017.-  Desde julio y hasta noviembre arriban a las costas uruguayas las ballenas francas, en busca de aguas tranquilas y templadas para reproducirse, amamantar y cuidar a los ballenatos.

Al tiempo que su llegada cautiva el interés de turistas y lugareños, el Ministerio de Turismo lanzará una nueva edición de la campaña de sensibilización sobre avistaje responsable.

Cientos de curiosos diariamente se acercan a las playas para disfrutar de los saltos, aletas, caudales y soplidos de la ballena Franca Austral muchas veces a escasos metros de la costa y bajo un paisaje incomparable.

La observación de los cetáceos en Uruguay se puede realizar desde la propia costa en tierra firme o en embarcaciones. Diferentes empresas privadas ofrecen excursiones en barco que parten desde el puerto de Punta del Este o Piriápolis. Esta actividad se encuentra regulada por el Decreto 261/02, con el objetivo principal de cuidar el recurso, salvaguardando la seguridad de los pasajeros y la calidad de los servicios brindados.

La Ruta de la Ballena Franca comprende la Antártida, incluye Puerto Madryn (Argentina) y luego de su presencia en costas uruguayas el trayecto culmina en Florianópolis (Brasil).

Uruguay está a favor de la conservación de las ballenas y delfines en el marco de la Ley General de Protección al Ambiente (Ley 17.283). Además, el Parlamento aprobó la Ley de Santuarios de Ballenas y Delfines en aguas Jurisdiccionales y la Zona Económica Exclusiva (Ley 19.128), y es país miembro  de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), donde  cada año miembros del Gobierno votan en contra de la caza ballenera.

CAMPAÑA

El Ministerio de Turismo organiza una nueva edición de la campaña de sensibilización dirigida a los niños  del Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU). La misma implica una capacitación sobre las características, el comportamiento de los cetáceos y el turismo responsable, además de un recorrido por la Ruta de la Ballena Franca en costas nacionales.

La iniciativa es apoyada por la Dirección Nacional de Medio Ambiente, el INAU y las intendencias departamentales de Maldonado y Rocha.

AVISTAJE GENERA
U$S 2,1 BILLONES

El avistaje de ballenas como actividad comercial comenzó en 1955 en Norteamérica, a lo largo de la costa sur de California. Hoy este turismo se realiza en más de 100 países, además de la Antártida donde las excursiones salen en busca de la gran ballena azul.

A nivel global, el avistamiento de cetáceos genera 2,1 billones de dólares al año y alrededor de 13 millones de personas contratan salidas de varias horas o expediciones de varios días para el avistamiento de cetáceos cada año, y estas cifras van en aumento.