Ventajas y diferencias entre los hoteles, hostales y bed&breakfast

Atraen distintos segmentos de huéspedes: alojamientos más tradicionales y variedades de hospedaje más modernas coexisten gracias a su oferta diferenciada.

SANTIAGO (Chile), 10 de Agosto — 2017.-  Desde hace un tiempo, existe un debate sobre si es mejor hospedarse en hoteles, hostales o en los modernos bed&breakfast. Algunos viajeros prefieren uno sobre el otro, y mucho se ha hablado sobre cuál estilo de hospedaje es mejor.

Por ello, a continuación, Despegar, la agencia de viajes online líder en Latinoamérica, comenta las ventajas de estas tres opciones:

HOTELES

Variedad: Hay muchos tipos de hoteles, que se dividen en categorías de acuerdo a estrellas o, en el caso de los hoteles más lujosos de algunos países, en diamantes. Esto permite que elijamos de acuerdo a nuestro bolsillo o al nivel de comodidad y lujo al que buscamos.

Personal capacitado y trato cordial: Sin duda, los hoteles se destacan por contar con un staff completo siempre a disposición del huésped. Desde el conserje al botones, pasando por el servicio de habitación, siempre habrá alguien disponible para cubrir todas nuestras necesidades. Al mismo tiempo, suelen ser personas capacitadas y con mucha experiencia, que brindan atención las 24 horas.

Muchos amenities: Un hotel de buen nivel contará con varios amenities para mejorar la estancia. Pueden incluir uno o varios restaurantes, gimnasio, piscina, acceso a internet y espacios recreativos.

Servicio a la habitación: No hay nada como tener un antojo a la madrugada y con solo levantar el teléfono y tenerlo en la puerta de nuestra habitación. Muchos hoteles cuentan con estos servicios las 24 horas del día.

HOSTALES

Precios: En general, los hostales suelen ser mucho más económicos que los hoteles, especialmente cuando decidimos hospedarnos en dormitorios compartidos. Mientras más camas tenga la habitación, más económica será la estadía.

Bueno para viajar en grupo: El punto anterior es especialmente bueno si viajamos en un grupo grande. Podemos reservar una habitación de ocho camas y pasarlo en grande, como en un hotel sin tener que compartir habitación con extraños y a un precio muy bajo. Además, los espacios comunes son ideales para relajarse con amigos después de un día recorriendo la ciudad. Muchos cuentan con mesas de pool, sillones, decks y otras áreas de recreación.

Cocina equipada: Las cocinas en los hostales suelen estar muy bien equipadas, lo que es muy bueno para los viajeros que quieren ahorrar dinero en comidas preparando sus propios almuerzos o cenas, sin gastar en restaurantes.

Conocer gente: El hostal es lo mejor para quienes viajan solos y buscan hacer amigos. Si el compartir una habitación con un australiano, un inglés y un colombiano no es suficiente para abrir horizontes, el ambiente relajado que se respira en los salones comunes o la cocina dará lugar a que se abran nuevas amistades. En general, la gente que se hospeda en hostales tiene la misma mentalidad, y buscan sociabilizar.

BED&BREAKFAST

Compartir experiencias: ¿Quieres viajar y saber dónde ir de vacaciones, pero todavía estás con dudas sobre el tipo de hospedaje? Alojarse en un Bed&Breakfast es una excelente opción para quienes desean compartir experiencias, conocer otras culturas y contar con asistencia personalizada de la región que visitan.

Precios: No hay nada mejor que utilizar el confort de una casa y economizar, ya que la tarifa en los B&B, normalmente, es más barata que en otros tipos de alojamiento.

Atención personalizada: Popularmente conocidos por la sigla B&B o, traducido, Cama y Desayuno, estas propiedades difieren de las posadas o los hoteles justamente por su simplicidad. El huésped es recibido en una casa por su propietario, que será también su anfitrión. Por lo tanto, durante su viaje, además del desayuno, podrá aprovechar los consejos de alguien que vive allí, además de ahorrar algunos pesos.

Aproximación a la cultura local: Uno de los puntos más positivos de hospedarse en un B&B es que la estadía permite conocer un poco más de la cultura local, observar, vivenciar y hasta participar de las costumbres familiares. Claro, el desayuno siempre es una excelente oportunidad para probar los sabores locales y conversar.